Redacción: Prensa y Comunicaciones
Todos
los días como de costumbre Luz Marina Arenas Flores de treinta y seis años
llega a trabajar al Concejo de Bucaramanga. Cuenta que en el año 1993, el
Concejal Celestino Mojica (Padre), llevaba siempre consigo su maletín que dejaba
constantemente en su oficina. “Hasta que un día Celestino me pidió el favor de
que lo abriera y me dio en secreto el número de la clave; me dieron unos
nervios incontrolables ya que él no lo descuidaba; cuando lo abrí me llevé una
sorpresa al descubrir que dentro guardaba objetos de gran valor personal y que
había puesto a prueba mi honestidad”.
Luz Marina funcionaria del
Concejo de Bucaramanga, con veintiocho años de trayectoria recuerda aquella
anécdota del año 1.993 como si fuera ayer, y que le dejó una gran enseñanza: “La honestidad y la integridad son absolutamente esenciales
para el éxito en la vida”; también manifiesta que siente un gran
agradecimiento con la Corporación, pues pudo cursar sus estudios y graduarse
como Profesional en Psicología.
Como Luz Marina, hay otros dos funcionarios:
Armando Fontecha y Carlos Humberto Santos que llevan veintiséis años prestando
sus servicios con honestidad en la Corporación, realizando
una ardua y exhaustiva labor en la evaluación y el control de resultados y en
el seguimiento al cumplimiento de los programas de desarrollo económico y
social de la Administración Municipal y con los que se beneficia la ciudadanía.
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